viernes, 28 de enero de 2011

El virus que atacó Irán podría haber provocado otro Chernóbil


Rusia manifestó que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) debería investigar el ataque cibernético con el virus troyano Stuxnet contra el reactor nuclear iraní, construido por técnicos rusos el año pasado, afirmando que el incidente podría haber creado un desastre de la magnitud de la catástrofe de Chernóbil.
Dimitri Rogozin (foto), embajador de Rusia ante la OTAN, dijo que el virus atacó el sistema de computación del reactor de Bushehr provocando que las centrifugadoras giraran fuera de control.

"Este virus, es muy tóxico, muy peligroso y podría haber provocado graves consecuencias", dijo al comparar el impacto de este virus troyano con las minas explosivas.
"Estas minas podrían haber provocado un nuevo Chernóbil", dijo Rogozin refiriéndose al accidente de 1986 en la planta nuclear de Ucrania, cuando ésta formaba parte de la Unión Soviética.
Funcionarios iraníes confirmaron que el virus Stuxnet atacaron las computadoras de la planta nuclear de Bushehr pero dijeron que no había afectado gravemente al sistema.
Expertos en seguridad estimaron que el virus troyano debió haber sido creado por un Estado para atacar el programa nuclear de Irán y que pudo haber sido originado en Estados Unidos o Israel.