Mark Kennedy, agente de Scotland Yard camuflado, estuvo 10 años infiltrado entre grupos ecologistas y anarquistas; ahora ha decidido cambiar de bando
Se había dejado melena, llevaba tatuajes y pendientes y pasaba por ser el activista perfecto. Mark Kennedy, agente de Scotland Yard camuflado, llegó a estar casi diez años infiltrado entre grupos ecologistas y anarquistas. Ahora ha dejado la Policía y ha decidido cambiar de bando, aunque sus antiguos compañeros le han recibido con insultos por haberles espiado.